Paoletti Guitars
Paoletti Azul Profundo
La conexión entre animal y hombre, es un instinto primal que rara vez se puede experimentar. Esta hermosa guitarra utiliza el cuero de una de los reptiles más temidos que hay: El lagarto. Finamente acabado en blanco matte, con acentos en gris, esta guitarra es una de las expresiones más originales y únicas de Paoletti. Exquisitamente fabricada a mano en Italia por el afamado luthier, es una envidiable pieza para cualquier colección. En bodega en ICON.
Inspección de 23-Puntos
Cada guitarra que se embarca de nuestra tienda, pasa una rigurosa inspección de 23 puntos esenciales, que garantizan que cada instrumento arribe listo para ser disfrutado en su máxima expresión.
Detalles de Envío
Los instrumentos viajan, según su tamaño y peso, por UPS, FEDEX o logísticas de carga en tarima de madera. Tomamos todas las precauciones necesarias para asegurar que el producto llegue en perfectas condiciones.
Garantías originales
Las guitarras de James Trussart cuentan con 12 meses de garantía en sus electrónicos, y contra cualquier defecto de fábrica. Esto no incluye fallas por maltrato o negligencia.
Alma nacida en las montañas Italianas
"Aquí yace la historia de cada guitarra hecha por nosotros. Amalgama intríncica de vedes montes tapizados de viñedos, la tierra que nutre la madera y nosotros, los creativos que fundamos nuestra cultura, con nuestros instrumentos. Es un privilegio pasmar nuestras memorias en una guitarra que acompañará a su ejecutante por muchos años de su vida creativa." - Fabrizio Paoletti, Fundador
Paoletti es reconocido, no por hacer la guitarra más técnicamente perfecta, si no por hacer instrumentos que se conectan de manera inmediata con ejecutantes de toda índole, por que tienen un "alma". Es difícil explicar, pero la guitarra es una extensión de nuestro cuerpo, y cuando uno encuentra el instrumento perfecto, el ejecutante genera una conexión muy poderosa. Esto es lo que ha puesto a Peoletti, en las manos de algunos de los instrumentistas más reconocidos del planeta.
